BASKETZARAGOZA.NET El domingo el CAI Zaragoza recibe al Baloncesto Sevilla en el Príncipe Felipe. Desde que el conjunto aragonés sellase su último ascenso a la Liga Endesa allá por 2010, hispalenses y rojillos se han medido en nueve ocasiones, quedando la décima para este fin de semana, con un balance de 5 victorias del CAI y 4 de los sevillanos. En ocho de esos nueve encuentros ha habido un protagonista en común: Joan Sastre.

Sastre, durante la presentación del equipo en el último partido ACB en el Príncipe Felipe

Después de un lustro en la capital andaluza y defendiendo los colores de un club del que llegó a ser capitán, el escolta mallorquín recibirá a sus antiguos compañeros en su nueva casa. Será un partido especial para Sastre, al igual que su primera visita a San Pablo engalanado con otra camiseta que no fuera la del Baloncesto Sevilla (77-73), pero un choque trascendental que el balear no quiere dejar escapar con el objetivo de volver a nutrir de victorias el balance del conjunto rojillo en el último encuentro en el Príncipe Felipe dentro de estas dos semanas de partidos en casa.

El exterior sabe lo difícil que es arrancar una victoria del recinto zaragozano. No en vano, el club andaluz, con Sastre en sus filas, tan solo ha logrado un triunfo en sus cuatro visitas al coliseo maño. Fue el año pasado (66-74), en la mejor campaña de los del Guadalquivir en los últimos años. Precisamente, la única temporada en la historia en la que el Baloncesto Sevilla se ha llevado el triunfo en los dos enfrentamientos ligueros. En la vuelta en San Pablo, el capitán de aquel equipo no pudo disputar el choque debido a una lesión, su única ausencia en los duelos directos entre sus dos equipos de la Liga Endesa. Pese a ello, los hombres entonces entrenados por Aíto García Reneses se alzaron con un cómodo triunfo (79-59) gracias, en buena medida, a la actuación de nuestro siguiente protagonista, autor de 16 puntos en 17 minutos.

Landry pugna con Porzingis por la posición en el rebote

Marcus Landry llegó a la ACB en octubre de 2011 para jugar seis partidos en las filas del Assignia Manresa, antes de abandonar la disciplina catalana un mes más tarde. Escaso tiempo pero suficiente para mostrar de lo que es capaz, firmando su mejor partido (11 puntos -3/5 en triples- y 3 rebotes), curiosamente en San Pablo y ante el Baloncesto Sevilla. Veinticinco meses más tarde, en diciembre de 2013, el de Wisconsin regresaba a España para enfundarse la elástica verdirroja, ponerse a las órdenes de Aíto y cuajar una segunda vuelta espectacular que valió a la joven plantilla hispalense clasificarse para los playoff, logro que se consumó gracias a un mate en rebote ofensivo del de Milwaukee en el último suspiro del dramático choque (83-81) ante el FIATC Joventut.

Ocho meses más tarde, Sastre y Landry ambicionan ese mismo objetivo de colarse en los playoff de la Liga Endesa. En una nueva ciudad y con otra camiseta, ambos ansían seguir sumando victorias en aras de saborear de nuevo las mieles de las eliminatorias por el título, aunque sea a costa de su antiguo club, donde dejaron compañeros y amigos. Circunstancia que olvidarán el domingo, al menos durante cuarenta minutos, cuando Joan y Marcus se transformen en anfitriones de su pasado.

Reportaje gráfico: Ramón Comet y B. Pérez