BASKETZARAGOZA.NET La vuelta al trabajo del CAI Zaragoza se ha realizado con la seriedad del momento que vive el equipo tras los dos últimos tropiezos, pero con la unidad del grupo y la serenidad que requiere el trance. De vuelta al trabajo este martes, tras una sesión específica en dos grupos, uno con los jugadores interiores y el otro con el resto, el equipo volverá esta tarde a la cancha para hacer trabajo de baloncesto específico. Solamente Chad Toppert estuvo ausente este martes a consecuencia de un proceso gastrointestinal.
Ante dos confrontaciones decisivas en apenas 5 días, Carlos Cabezas apela desde su experiencia al grupo. Es lo que nos queda, estar unidos cuando las cosas no van tan bien. Han sido un par de tropiezos, sobre todo el último, en que tuvimos opciones de ganar fuera de casa, haciendo una buena semana de entrenamiento a pesar de los tocados las lesiones, y no supimos ganarlo. Nos quedan un par de semanas para sumar y coger confianza, reconocía el malagueño.
En cuanto a las causas de los dos tropiezos, el base del CAI Zaragoza señalaba a las perdidas de balón. Quizá fueron decisivas, junto con algunas malas decisiones pero hay que tomarlas y yo en la última no tome la decisión mas adecuada; hay que asumirlas porque a veces salen bien y otras mal, explicaba.
En un mayor análisis, Carlos Cabezas también comentó la falta un poquito de carácter, de solidez y de tranquilidad para sumar, no cometer pérdidas de balón. Pecamos de perder balones importantes, donde tienes opciones de ganar y no fuimos listos, dijo.
Pero mirando hacia adelante, el 10 del CAI Zaragoza asume el amplio margen de mejora que tiene el equipo, porque hay muchos jugadores que no estamos al cien por cien o acertados. Hay que ser optimistas porque van a llegar los resultados, declaró.
Pasar página cuanto antes y pensar en la cita del domingo es la filosofía que aplica Cabezas. Ahora vamos a pensar en el próximo partido ante Murcia, que es muy importante para nosotros y después viene rápido Valladolid. Estas semanas son importantes de cara al futuro de dónde pueda estar el equipo y coger esa confianza que se necesita y que solamente arreglan los resultados, reseñó.
En cuanto al equipo de Luis Guil, el malagueño lo define como un bloque con una plantilla muy completa, jugadores con experiencia y que saben jugar, con resultados que les avalan y están mejor que nosotros, hay que aceptarlo. El domingo tenemos que salir como a una final y que haya sangre para ganar este partido, aseveró finalmente.