El 'Infierno Rojo' del CAI Zaragoza se abrió con rugidos de Harley Davidson

BASKETZARAGOZA.NET Era noche de presentaciones, de emociones y de puesta en escena de un Infierno Rojo que tiñó las gradas y la pista de humo, fuego y rugidos de las Harley Davidson. Alli en pista irrumpieron los jugadores rojillos para dar la bienvenida a la campaña 2015-16 y abrir de par en par las puertas del 'Infierno Rojo' en el templo de las emociones caístas.  

Arrancó el espectáculo con el baile de las cheerleaders antes de dar paso al primer motero de la noche, Link. Enfundado en cuero negro, se desmontó de la moto y, como si fuese un integrante maño de AC/DC pero sin faldas, rompió su guitarra con el look más agresivo que ha lucido en este infierno la mascota del CAI Zaragoza.


Jelovac, presentado a lomos de una Harley Davidson

De lo ideal a lo terrenal. De los senior Martí, García, Pursl y Kohs al cuerpo técnico saliendo con el paso firme y disciplinado que acostumbran, abriendo la comitiva rojilla. Todos tuvieron su aplauso sentido, desde el delegado Luis Giménez, el primero de la fila, al coach Joaquín Ruiz quien cerró “la maquinaria que está en as calderas”, se oía por megafonía.   

Subieron los decibelios. “Ha llegado el momento que estabais esperando”, decía el speaker. Rugían las tres Harley que galoparon suavemente por el parqué para traer a los nuevos rostros y a los viejos caístas del lugar. Desde Fotu a golpe de 'haka', a la muñeca de Diener uno a uno fueron saliendo entre focos, sombras, humo y gas del acelerador.


Jugadores, cuerpo técnico, afición e Inchas, en un mismo posado

Todo parecía haber acabado con el último jugador, el capitán Henk Norel ovacionado. Pero no. Faltaba algo. Una breve representación de la 'marea roja', parte esencial del club y de este equipo. Ellos acompañaron en la presentación baloncestística a los de Joaquín Ruiz Lorente. Todos juntos. Perfecta imagen.

Allí aparecieron varios miembros de los Inchas Lleons y la familia Boudet con sus trillizas de cuatro años. Segundos después, “no hay futuro sin pasado”, acertó a decir el speaker en la presentación de los juniors de oro de  la marea roja: Asun Laplana y Roberto Díez, de 85 y 83 años, salieron por el túnel en un momento que a buen seguro recordarán. Dos de los abonados de mayor edad del CAI Zaragoza -y desde 2002- que exhibieron la emoción de lucir la elástica rojilla de sus amores con el dorsal de sus edades. Sonreía Jelovac con su '89' y aplaudían BVocal, esas voces del averno, voces endemoniadas pero de corazón caísta.  


Roberto Díez, Asun Laplana, la familia Boudet e Inchas Lleons junto a Link

Y como de baloncesto iba el asunto, se dispersó la reunión rojilla regalando a la grada balones para rubricar una noche especial de la marea roja. Luego, el partido. Pero en el descanso, la familia caísta se completó con la presentación de las categorías base del club, donde casi un centenar de jugadores y técnicos también presentaron en sociedad para perpetuar al CAI Zaragoza.

El 'Infierno Rojo' ha comenzado. Bienvenidos.

Reportaje gráfico: Esther Casas y Ramón Comet