CASADEMONTZARAGOZA.ES El pívot del conjunto aragonés repasa lo que ha sido la frenética primera semana de competición en la Liga Endesa y lo que pueden esperar del duelo frente a Valencia Basket (sábado, 20.45 horas). Un choque especial para él en el que se reencontrará con compatriotas y viejos compañeros, y en el que el apoyo de la ‘marea roja’ volverá a ser fundamental.
Aunque el duelo del pasado fin de semana fue duro, Hlinason no pierde la sonrisa y mantiene su confianza en el equipo: «El último ante Hereda San Pablo Burgos, pero los dos primeros partidos jugamos muy bien y tenemos todo para seguir creciendo», valora. «Con tiempo y trabajo estaremos bien y encontraremos nuestro momento». Sin embargo, la ACB no da descanso y en el horizonte aparece ya otro rival de nivel y al que conoce bien: «Tienen muchos jugadores que continúan y siempre es un poco especial para mí», reconoce sobre el partido ante Valencia Basket. «Es una gran motivación jugar ante jugadores como Dubljevic que tanto me ayudaron cuando llegué», sostiene acordándose también de su compatriota Martin Hermansson. «Además hay otro islandés y siempre nos damos caña entre los compatriotas», admite entre risas.
Será el cuarto enfrentamiento ante un rival de pretemporada. Un precedente al que el de Akureyri no da demasiada importancia: «En aquel momento teníamos muchas dudas, pero ahora sabemos mejor lo que tenemos que hacer», afirma sin olvidarse del potencial de los levantinos. «Tienen muchos jugadores a los que parar, Jaume los conoce y tenemos que prepararnos», advierte sin olvidarse también de su poderío físico atrás. «Pero también son una de las mejores defensas de la liga», subraya recordando las dificultades que les ha causado esa dureza. «Hereda San Pablo Burgos ya jugó muy físico y nos sorprendió, así que tenemos que aprender y salir duro desde el inicio».
Además, pese a las numerosas bajas que asolan al cuadro ‘taronja’, el internacional islandés no quiere ver ni un atisbo de confianza: «Tienen muchas lesiones, pero los que estén querrán jugar muy bien», esgrime. «Tendrán menos jugadores que de normal pero aun así cuentan con muchos buenos». Por eso, insiste en el trabajo que deben realizar durante toda la semana y cuando se alce el balón al aire: «Tenemos que salir bien y fijarnos en nosotros: jugar bien y duro». Algo en lo que influirá una vez más el aliento de la afición rojilla: «Me siento genial en los partidos en casa», asegura. «Se crea una atmósfera increíble y estoy muy contento con ellos». Sobre todo, por su pasión incondicional: «Más allá de la derrota, con su apoyo hubo un punto en el que estuvimos ahí. Contamos con todo su amor y eso nos ayuda mucho y es muy importante», concluye agradecido.