CASADEMONTZARAGOZA.ES Una de las piezas más codiciadas del mercado veraniego llega a Casademont Zaragoza.
Jahlil Okafor, número tres del draft de la NBA en 2015, ingresa por la puerta grande en El Club de la RASMIA. Tras seis temporadas en la liga norteamericana y 247 partidos a sus espaldas en algunas de las franquicias más importantes de la competición, el pívot norteamericano con pasaporte nigeriano da el salto a Europa de la mano de Casademont Zaragoza firmando por una temporada.
Okafor (27 años y 2´08m) es, sin duda, un pívot determinante, con un gran físico y un amplio repertorio de fundamentos en el poste bajo. El nuevo jugador de Casademont Zaragoza se convirtió en uno de los jugadores más deseados durante su etapa de instituto. De hecho, en junio de 2012, la conocida revista Sports Illustrated lo nombró uno de sus "Future Game Changers", un grupo de catorce jóvenes atletas que son considerados como los mejores talentos de su respectivo deporte.
Previsiones que se hicieron realidad en el draft de 2015, en el que Okafor fue elegido en tercera posición por Philadelphia 76ers, quedando por detrás de Karl-Anthony Towns y D’Angelo Russell y superando a Porzingis (4), Hezonja (5), Devin Booker (13), Willy Hernangómez (35) o Dani Díez (54).
Desde entonces, el nuevo pívot de Casademont Zaragoza atesora 247 partidos en la NBA en prestigiosas franquicias como Philadelphia 76ers, Brooklyn Nets, New Orleans Pelicans, Detroit Pistons… Y en su primer año en la NBA fue incluido en el mejor quinteto ‘rookie’.
Tras un breve paso por China, la temporada pasada dominó la G-League de la NBA en los Capitanes de Ciudad de México, firmando unos registros espectaculares: 20´9 puntos, 8´1 rebotes y 1´5 asistencias para 24´4 créditos de valoración.
Nunca en todo el Siglo XXI había llegado a Zaragoza un top 3 del DRAFT NBA y Okafor lo hace tras un trabajo que viene de lejos, fruto del cual se alcanzó un preacuerdo que, a pesar de sufrir complicaciones en las últimas horas, ha tenido el final deseado por club y jugador.
¡Bienvenido a Zaragoza, Jahlil!