CASADEMONT ZARAGOZA.ES Siguiendo la hoja de ruta marcada la comisión deportiva continúa avanzando en la confección de la plantilla del equipo masculino. A veces, como en la orfebrería: con la paciencia que requiere una delicada labor.
Así se ha cerrado el fichaje de Jahlil Okafor por Casademont Zaragoza. Porfirio Fisac no oculta su satisfacción al tiempo que aprovecha para subir el listón de la exigencia: “Sus características se adaptaban un poco a que nuestro club también quiere dar ese paso hacia delante. Dar las gracias al club, pero también esperar que él sepa que es una oportunidad que no puede desaprovecharla”, reconoció.
Las conversaciones entre jugador y técnico han sido fundamentales y el reto es tremendamente ilusionante: “Es un jugador que tiene un pedigrí y que tenía unas condiciones cuando acabó su etapa universitaria y por el recorrido que él había hecho como para ser una estrella en la NBA pero nunca llegó a conseguirlo por lo que, cuando hablé con él, concretamos que es un reto mutuo”, reveló Porfi.
Fisac tiene el foco en dar un paso adelante y una de las premisas pasa por lograr la mejor versión de cada jugador. La calidad y las condiciones de Okafor están fuera de toda duda y Porfirio es especialista en sacar lo máximo de los jugadores. Es el reto conjunto que se han marcado entrenador y jugador: “Es un reto que tengo como entrenador, pero es un reto que él tiene de saber qué nivel y qué tipo de jugador es. Lo que todo el mundo pensaba de él pues hay que demostrarlo. Esta es una oportunidad que él tiene para demostrar hasta dónde quiere realmente llegar”, un reto que ya emociona a la Marea Roja.