BASKETZARAGOZA.NET Totalmente centrado en el importante encuentro en la capital andaluza frente al Baloncesto Sevilla (domingo, 18.00 horas), el entrenador del CAI Zaragoza tiene claro cuál debe ser el camino para conquistar el quinto triunfo de la temporada: un trabajo defensivo en el que será importante la contribución de un Slava Kravtsov que debutará.
En el marco de la primera semana completa de trabajo de la que disfruta el equipo este curso, el técnico estaca cuál está siendo el objetivo primordial: “Estamos priorizando integrar a Slava e incorporar nuevos conceptos tácticos. Le está costando porque la carga táctica que sus compañeros ya tienen asimilada para él es nueva. Es normal que le cueste un poco pero los dos días que lleva con nosotros está bastante bien”, valora. “Es más móvil que Henk para defender muchas situaciones y no creo que tengamos tantos problemas en el aspecto defensivo con él”, afirma sobre su integración en los sistemas.
Con él ucraniano listo para su debut en San Pablo, Casadevall destaca la que cree que será la clave del choque: “Todo va a residir en el trabajo defensivo. El equipo ha mostrado dos caras y mantener una línea de mejora es vital. Si en Sevilla no defiendes y juegas a un alto nivel es muy difícil ganar. Es un equipo que juega francamente bien en su pista”, destaca al tiempo que opina que se tienen que dar más pasos hacia delante. “Al equipo le queda tener esa constancia y ese grado de concentración pese a que habrá rivales que nos pongan las cosas más difíciles que otros”, justifica.
En esa misma línea, la actitud y la predisposición son claves para el líder del vestuario rojillo: “Está claro que en baloncesto se puede perder. Hay días en los que estás menos acertado y hay que buscar hacer otras cosas para poder llevarte el partido, pero atrás hay que mantener el mismo grado. Tenemos que lograr poder sacar partidos adelante. Tenemos que seguir aprendiendo”, asegura. “El equipo ha cambiado la cara, está trabajando con más confianza pero hemos de ganar más partidos y encontrar una regularidad en nuestro juego, tanto ofensivo como defensivo”, confía el de Santa Coloma.
Recién entrado el nuevo año y con confianzas renovadas, el entrenador confiesa sus peticiones para estos próximos 365 días: “En 2015 no me ha ido mal individual y profesionalmente hablando. Le pido a este nuevo año tener al menos lo mismo y que el CAI Zaragoza empiece el 2016 con nuevos bríos y afrontando los retos futuros con esperanza y alegría. ME gustaría ver un CAI con la alegría con la que lo dejó José Luis Abós y en lo más alto”, concluye el técnico.