BASKETZARAGOZA.NET El base del CAI Zaragoza no necesita motivación para encarar un partido que reviste la trascendencia del de mañana ante el Szolnoki Olaj (20.30 horas). Exigente consigo mismo como el que más, Henry promete dar el máximo para amarrar la primera victoria en el Last 32.

Pese a las dos últimas derrotas del equipo, el vestuario rojillo se mantiene mentalizados: “Estamos bien. Tratamos de mantenernos positivos y seguimos trabajando duro concentrados únicamente en el partido de mañana para tratar su conseguir la victoria. Eso es todo lo que nos preocupa ahora”, asegura el estadounidense. “Todos los partidos son importantes pero somos conscientes de la trascendencia del partido de mañana para nosotros y saldremos a dar lo mejor de nosotros para sumar el triunfo”, insiste.

Acerca de las dos nuevas incorporaciones del equipo, Slava Kravtsov y Jordan Swing, Henry no duda de su calidad pero aboga por darles tiempo: “Ambos son buena gente y no tengo duda de que pueden ayudar al equipo. Ahora solo tienen que adaptarse, aprender los sistemas y las jugadas. Una vez lo hagan y estén cómodos tendrán un gran impacto en el equipo”, afirma.

En cuanto a su aportación al equipo, el director de juego se muestra ambicioso: “Soy inconformista. Sé que siempre lo puedo hacer mejor de lo que lo hago. Me gusta motivarme y exigirme al límite; a veces incluso demasiado. Creo que lo estoy haciendo bien pero sé que lo puedo hacer mucho mejor”, admite convencido. “Sé de lo que soy capaz y solo tengo que producir en lo que sea necesario para ganar partidos: defendiendo en un final de partido, asistiendo a los interiores, anotando… Lo que se necesite para ganar: ese es el principal objetivo. Vencer es lo más importante”, insiste

Siguiendo con esa autocrítica, el californiano confiesa tener la necesidad de continuar con su proceso de aprendizaje para rendir igual en todas las competiciones y ser inteligente sobre el parqué: “Cuando te mides a otro jugador lo miras a los ojos y yo pienso que soy mejor que quien esté delante, que quien defienda. Así se supone que debe ser y eso es lo que hay que creer. Y se aprende mucho. Defensivamente soy un jugador muy físico y he de aprender a no tener problemas de faltas. En la ACB tengo problemas me señalan muchas personales y sé que no tengo que usar las manos sino mi cuerpo, ser inteligente en la cancha. Cada competición es diferente y tienes que adaptarte”, finaliza.