BASKETZARAGOZA.NET El entrenador de Tecnyconta Zaragoza apela a la ambición y la autoexigencia para hacer frente a los próximos dos compromisos a domicilio que aguardan al conjunto aragonés. El primero de ellos, ante un Movistar Estudiantes (domingo, 19.30 horas) que se muestra muy sólido en casa y que ha encontrado estabilidad con las importantes incorporaciones de Gentile y Whittington.
Con la única duda de Marc Martí, el equipo afronta la primera de sus dos visitas consecutivas: “Entramos en una vorágine de dos partidos fuera en los que el rival se juega mucho”, señala ante los intereses de UCAM Murcia y Movistar Estudiantes, próximo examen de su equipo: “Tiene las ideas mucho más claras desde la llegada de Whittington”, apunta el segoviano. “Cuentan con mucha versatilidad interior y la baja de Arteaga condiciona porque jugarán con gente abierta que puede tirar”, advierte sobre uno de los peligros estudiantiles.
Tras la victoria el pasado sábado, Tecnyconta Zaragoza llega al WiZink Center muy cerca de certificar la salvación: “Hemos dado un paso de gigante hacia el objetivo prioritario”. Sin embargo, Fisac quiere más: “Es un partido muy importante, un duelo de ambición en el que debemos demostrar qué queremos ser y adónde queremos llegar”, exige ante lo que espera una buena versión del cuadro colegial. “Deseo que juegue al mejor nivel para que nos obliguen a sacar lo mejor de nosotros”.
Actitud que debe servir como guía para encontrar siempre objetivos que estimulen la competitividad del grupo: “No me gustaría estar en tierra de nadie en cuatro jornadas”, asegura el castellano-leonés. “Debemos ser lo suficientemente ‘cabrones’ para agarrarnos a la liga por donde queremos”, apunta con total ambición. “Y eso pasa por hacerlo con los que están arriba”, sentencia apuntando alto.
Para conseguirlo, el técnico rojillo apela a la personalidad que demostró el vestuario el pasado fin de semana frente a un rival de la talla del Iberostar Tenerife: “El grupo siempre ha tenido ambición y el otro día demostró hambre”, destaca. “Pero lo que también demostró el equipo es que hay que ponerse las pilas porque los minutos van a estar muy caros”, añade orgulloso de que sus pupilos le pongan las cosas difíciles. “Es muy importante tener ese hambre de ser más porque el conformismo es el primer punto de declive”, concluye.