BASKETZARAGOZA.NET El entrenador de Casademont Zaragoza tiene claro que el encuentro frente al Club Joventut de Badalona (domingo, 17.00 horas) es un exigente test, tanto por la mermada situación de la plantilla como por el crecimiento de su rival. Un choque donde los jóvenes volverán a tener un papel preponderante y en el que el empuje y el apoyo de la ‘marea roja’ jugará un papel fundamental.
“Es un partido complicado”, reconoce el técnico debido a las bajas y la acumulación de minutos. “Todos tenemos que dar un paso adelante importante”, demanda para hacer frente a un Joventut de Badalona al alza. “Los cambios del año pasado y las bajas les llevó a un momento de dudas pero son de nuevo un equipo sólido y con las ideas muy claras”, sostiene a tenor de sus tres victorias consecutivas en la Liga Endesa. “Tienen un base y un pívot determinantes, a Prepelic yendo hacia arriba y aleros como Ventura y López-Aróstegui de máxima entrega”, enumera.
Por eso, Fisac no tiene dudas: “Es una prueba de fuego”, califica sobre el duelo del domingo. “Vamos a tener que seguir matando con la gente joven y obligándolos a que sigan dando pasos hacia delante”, argumenta sobre la creciente participación de los canteranos. “Será un partido muy duro porque ellos se han asentado y están yendo hacia arriba con gente como Prepelic, Omic o Harangody”, insiste citando alguna de las referencias verdiblancas, así como a la última incorporación de los catalanes. “Buford les dará mucho uno contra uno y un componente físico aún mayor”, analiza.
Será el estreno del estadounidense en la competición, tras no llegar a debutar el miércoles en la EuroCup: “La Liga Endesa no perdona”, defiende el segoviano centrado únicamente en la competición doméstica. “Me da igual lo que hayan hecho antes o lo que hayamos hecho nosotros”, esgrime convencido. “Es un partido muy importante en el que nos enfrentamos a un equipo que está a muy buen nivel”, recalca. “No me importa para nada todo lo que suceda alrededor”. Por eso, el técnico rojillo no quiere excusas. “Si tenemos un número de gente para jugar, tenemos un número de gente para ganar”.
Sin embargo, el castellano-leonés tampoco quiere que la gente se deje llevar por la euforia que puede despertar la clasificación: “Hay que ser conscientes de lo que somos y de que estamos para disfrutar”, recuerda. “Nadie puede venir a exigir, todo el mundo ha de venir a empujar”. Algo que refuerza con la actitud de su plantilla: “Nosotros demostramos cada día que no nos vamos a rendir ante nadie”, subraya. “No marcamos una filosofía de ganar o perder sino de juego”. Un estilo innegociable pero tocado por las importantes ausencias: “Ahora mismo estamos huérfanos”, asimila aludiendo a las bajas de Seibutis, Vázquez y San Miguel. “Necesitamos ayuda, y mía del que más”, asume. “Quien venga, que lo haga a empujar y a ser valiente”, concluye tratando de aunar esfuerzos.