CASADEMONTZARAGOZA.ES Con una representación reducida de las dos plantillas, masculina y femenina, además de los principales estamentos del club rojillo, Basket Zaragoza ha recuperado otra de las tradiciones de cada pretemporada, la recepción en el Ayuntamiento de Zaragoza y la ofrenda a la Virgen del Pilar.
Tras una año de ausencia por la pandemia del COVID-19, Casademont Zaragoza ha vuelto a recuperar los actos institucionales de la recepción en el Ayuntamiento y la visita a la Basílica de Nuestra Señora del Pilar. Eso sí, con una delegación reducida en la que Zoe Hernández, Anna Cruz y Antonia Delaere, junto al técnico Carlos Cantero, han representado a la plantilla femenina, mientras que Rodrigo San Miguel, Javi García, Stan Okoye y Jaume Ponsarnau han hecho lo propio con la masculina. Junto a ellos han estado Reynaldo Benito, presidente del club, y varios consejeros de la entidad, junto al gerente Javier Gastón y el director deportivo Pep Cargol, quienes han completado la expedición rojilla.
Todos ellos han sido recibidos en el Consistorio por Sara Fernández, vicealcaldesa y consejera de Cultura y Proyección Exterior de Zaragoza, y por Cristina García, concejal delegada de Deportes, así como por otros representantes de los grupos municiaples. En el turno de palabra, Fernández ha elogiado a la entidad rojilla por su fomento de la igualdad poniendo los mismos recursos para ambas secciones: masculina y femenina. Unas palabras que ha recogido Reynaldo Benito, mostrando el inspirador objetivo de llevar a Zaragoza lo más alto posible. Finalmente, Cristina García ha puesto el foco en la Fundación Basket Zaragoza, los cientos de niños y niñas que desean jugar en el Casademont Zaragoza, así como ha celebrado la vuelta del público al pabellón.
OFRENDA FLORES A LA VIRGEN DEL PILAR
Posteriormente, en un acto más privado, la representación de Casademont Zaragoza se ha dirigido a la Basílica, donde fue recibida por el Capellán de la Virgen del Pilar, P. José Maria Bordetas, antes de depositar un ramo de rosas rojas en el camarín de la patrona de Zaragoza. Rodrigo San Miguel ha leído una breve oración en la que ha pedido apoyo para no desfallecer en los momentos difíciles, protección ante la adversidad y lucidez de espíritu para saber afrontar los momentos de dificultad que nos toque vivir. Antes, el capitán rojillo ha querido acordarse también de familiares y amigos de la gran familia de Basket Zaragoza que nos han dejado durante la pandemia.