BASKETZARAGOZA.NET El presidente del CAI Zaragoza, Reynaldo Benito, hace balance de 2013, un año que ha resultado tan exitoso como ilusionante para todos los seguidores del equipo. Copa del Rey y Playoff, junto al debut en Europa y clasificación para el “Last 32”. Un año para enmarcar. Desde la web del club quiere compartir sus sensaciones con todos los seguidores del CAI Zaragoza.

Ha sido 2013 un año para recordar y para saborear.
Sí, seguro que vamos a recordar este 2013 porque han sido muchas las sensaciones y las emociones que hemos vivido. Hemos participado en nuestra primera Copa del Rey, jugamos un playoff con Valencia que es imborrable, vivimos el regreso a Europa 17 años después, logramos la clasificación para la segunda ronda de la Eurocup… Muchas cosas y todas positivas. Seguimos consolidando el proyecto.

¿Con qué momento se queda?
Es difícil de elegir pero hay varios momentos importantes: el ambiente de la marea roja en Vitoria, el triunfo en Valencia en el tercer partido de playoff después de perder en casa, el último partido en el Príncipe Felipe con la gente cantando “Campeones, campeones” cuando nos iba a eliminar el Real Madrid o el partido ante el Belfius Mons Hainaut, por ser el primero en Europa. Incluso acabar como primer club de baloncesto la temporada pasada. Todos han sido muy importantes y todos tienen su momento para el recuerdo

¿Cuál ha sido la receta de ese éxito?
Creo que el trabajo y el esfuerzo de equipo bien hecho. Desde el primero hasta el último de los que participan en el CAI Zaragoza. Es indudable que la confección de la plantilla por Willy Villar y José Luis Abós en pretemporada fue el primer paso. Luego el trabajo en el banquillo del cuerpo técnico, el esfuerzo de los jugadores y el club por querer llegar lejos, fueron claves. Pero además está el trabajo de más gente como consejeros, la gente de las oficinas, patrocinadores, instituciones... Todos sumaron. Luego siempre hay un pequeño componente de suerte que debe ayudar, aunque para alcanzarla también hay que buscarla. Y, por supuesto, y no por ello menos importante, el apoyo de la marea roja porque sin ella todo esto no tendría mucho sentido.

¿El peor momento de este año?
Quizá la lesión de Norel. Aún recordamos el silencio que se produjo en el pabellón en aquel instante. Nos dejó muy tocados a todos porque, además de aportar su carisma personal, Henk estaba haciendo una temporada soberbia. No pudo disfrutar de una parte importante de ese éxito jugando en la pista pero, como uno más, es artífice de lo conseguido. Felizmente le queda poco para regresar, está entrenando bien y queremos verlo vestido de corto muy pronto, cuando esté completamente recuperado.

El final de 2013 ¿qué sensaciones le deja?
Que debemos recuperar la esencia de lo que nos ha traído hasta aquí para que la gente se sienta orgullosa del CAI Zaragoza. Debemos luchar todos los partidos y no bajar nunca los brazos. Luego ganaremos o perderemos, pero siempre dando lo máximo. No hay secretos. La experiencia de este año 2013 es el mejor ejemplo para saber por dónde pasan nuestras opciones de tener éxito.

¿Y cómo ve el 2014?
Con incertidumbres pero con la misma ilusión de siempre. Todos nuestros retos deportivos, a día de hoy, son posibles y hay que competir por ellos. Luego en los despachos jugaremos otro partido para intentar seguir creciendo como club. Creo que 2014 puede marcar un punto de inflexión para el CAI Zaragoza. La experiencia europea es muy bonita y, a final de temporada, veremos si es una realidad sostenible y si entre todos podemos permitirnos disfrutar en el Príncipe Felipe de esta competición en el futuro. Solemos repetir que el CAI Zaragoza será lo que entre todos queramos que sea y eso es así. Nosotros dimos el paso deportivo y a final de temporada habrá que valorar la experiencia. Mientras tanto, hay que disfrutar de lo que viene, que no es poco.

¿El equipo se seguirá llamando CAI Zaragoza?
Ojalá sea CAI Zaragoza por muchos años. Estamos muy agradecidos por el apoyo que Caja Inmaculada nos ha dado en todos estos años, porque sin la CAI el proyecto habría sido otro; no sé cómo pero otro distinto. Nosotros estaremos encantados de estar todo el tiempo que sea posible con Caja Inmaculada –ahora Grupo Ibercaja- pero no depende solamente de Basket Zaragoza 2002 SAD. Ha sido un matrimonio perfecto y una marca de éxito deportivo y social para Zaragoza y Aragón.

Javier Marín, Laszlo Dobos y Sergi García se suman desde la cantera
Siempre hemos apostado por la cantera aunque es un trabajo lento pero efectivo. Hay gente que viene por detrás con muchas ganas. Javier Marín es jugador de la primera plantilla. Laszlo Dobos entrena con el primer equipo y juega con el EBA al igual que Sergi García; ambos han debutado con el primer equipo y ha demostrado que tiene posibilidades pero hay mucho por trabajar con ellos y con los que vienen. Lo importante es que van subiendo el número de internacionales en categorías base y estamos haciendo un enorme esfuerzo económico por contar con más becados. La llegada de Luis Arbalejo ha dado un giro a las categorías base y ojalá poco a poco dé cuantos más frutos mejor.

¿Un deseo para el próximo año?
Nos gustaría que 2014 trajese para el CAI Zaragoza éxitos deportivos. Y por pedir algo a los Reyes Magos, unas instalaciones propias. Necesitamos un lugar fijo para nuestras categorías base del club y además una vía de sostenibilidad del proyecto por muchos años. Hay que buscar nuevos recursos propios para hacer viable el club y esa es una forma que a todos nos beneficiaría. La cesión de los campos de fútbol base a los Clubes, que ha realizado de forma brillante el Ayuntamiento de Zaragoza, es un buen ejemplo de éxito para todos que podría aplicarse también al baloncesto.

Para finalizar, ¿algún mensaje para la afición?
Sí. Aúpa CAI… SIEMPRE